Visitamos los campos de Cham Mishko y de Bouzan donde trabajamos en el fortalecimiento de los centros de salud que atienden a la población yazidí desplazada y retornada.

Visitamos los campos de Cham Mishko y de Bouzan donde trabajamos en el fortalecimiento de los centros de salud que atienden a la población yazidí desplazada y retornada.
Más de 110.000 personas, la mayoría de ellas mujeres y menores, se benefician de las mejoras en los equipamientos e infraestructuras sanitarias de zonas rurales de las regiones de Kayes y Ségou, donde se fortalecen los programas de salud sexual y reproductiva.