Ambas entidades colaboramos desde el año 2020 con intervenciones de salud donde destacan Ucrania, Uganda y tres acciones en la Franja de Gaza
El Ayuntamiento de Elche y Farmamundi renuevan su convenio de emergencias por cuarto año consecutivo con una intervención para mejorar el acceso a servicios sanitarios y de protección de las personas refugiadas del asentamiento de Adjumani, en Uganda, tras la llegada masiva de población refugiada sursudanesa y sudanesa. Desde el año 2020 ambas entidades han desarrollado 7 intervenciones en 6 países que han mejorado la salud y calidad de vida de 6.812 personas, más de la mitad de ellas mujeres y niñas.
En la renovación del convenio, celebrada en las instalaciones de Farmamundi en Paterna, ha asistido Celia Lastra, Teniente de alcalde de Acción Social del Ayuntamiento de Elche, Joan Peris, director General de Farmamundi y Tania Montesinos, responsable de acción humanitaria.
La edil ilicitana, Celia Lastra, ha manifestado que “Gracias al convenio que mantenemos con Farmamundi es posible activar una respuesta rápida ante las emergencias, ya que está capacitado para distribuir casi inmediatamente los suministros en coordinación con los organismos y entidades que la gestionan sobre el terreno. De esta forma, el Ayuntamiento de Elche se garantiza su contribución a atender las necesidades más urgentes de las personas afectadas por las crisis humanitarias, en los primeros momentos tras la catástrofe”.
Apoyo a la población de Gaza
Gracias a este convenio se desarrollaron tres intervenciones en la Franja de Gaza los años 2021, 2022 y 2023 que contribuyeron a mejorar la salud de más de 2.600 personas antes de la ofensiva actual. En estas acciones se entregaron kits de protección para la prevención de contagios por el COVID-19 entre los hogares con mayores necesidades y alimentos básicos.
“Junto a la ONG palestina Labour Resources Center suministramos kits nutricionales de alimentos frescos y no perecederos y específicos para menores en situación de vulnerabilidad. También kits para la prevención y contención del COVID-19. En la actualidad la población gazatí sufre una ofensiva desde hace cuatro meses que está dejando un país totalmente devastado, con más de 28.000 personas fallecidas y más de un millón de personas que necesitan asistencia humanitaria urgente”, relata Tania Montesinos, responsables de Acción Humanitaria en Farmamundi.
Atención sanitaria a población refugiada en Uganda
Además de las acciones en la Franja de Gaza, se llevaron a cabo intervenciones en República Democrática del Congo, Ucrania, Turquía y Siria y en Uganda, país este último donde se está desarrollando una nueva acción que finaliza en mayo de 2024.
“Estamos mejorando el acceso a servicios sanitarios y de protección de las personas refugiadas en el asentamiento de Adjumani, tras la llegada masiva de población refugiada sursudanesa y sudanesa, con la entrega de medicamentos y materiales médicos esenciales y adaptados a sus necesidades, principalmente para la reducción de la mortalidad materno-infantil y la atención clínica de la salud sexual y reproductiva y de la violencia sexual. También artículos de higiene personal y menstrual y mosquiteras para la prevención de enfermedades”, explica Montesinos.
En el campo de refugiado de Adjumani viven actualmente 219.763 personas refugiadas. Es el distrito que mayor número de población refugiada acoge de Uganda, con el 54% mujeres y el 84% mujeres y niños/as, que proviene sobre todo de Sudán y Sudán del Sur, como consecuencia del estallido de los conflictos armados en estos países en abril de 2023 y el reciente recrudecimiento de los combates.
El resto de intervenciones han sido para apoyar a la población en Ucrania, que este mes de febrero cumple su segundo año de guerra. En la región de Poltava repartieron 250 kits sanitarios, 182 paquetes de pañales, 193 kits de nutrición infantil y 49 kits de alimentos y medicamentos para un total de 674 personas.
Kits de dignidad para mujeres en Beni
En República Democrática del Congo se llevó a cabo una intervención de emergencia para la atención de las personas desplazadas por el conflicto armado en la Zona de Salud de Mutwanga, territorio de Beni, en un contexto de pandemia por COVID-19. Más de 400 personas en situación de extrema vulnerabilidad recibieron kits de emergencia para la atención de sus necesidades más urgentes, entre ellas 190 mujeres embarazadas y lactantes y 110 niños y niñas menores de 5 años. recibieron kits nutricionales. También se repartieron kit dignidad, con artículo de higiene personal femenina y se realizaron 38 sesiones de sensibilización e identificación sobre medidas de bioseguridad, nutrición e higiene, llegando a 6.602 personas, 4.149 mujeres y 2.453 hombres.
Alimentos para familias en Siria y Turquía
En 2023 se llevó a cabo la atención a población turca y siria en situación de mayor vulnerabilidad afectada por el terremoto en el distrito de Pazarcık, provincia de Kahramanmaras, Turquía. Se proporcionó ayuda humanitaria a un total de 2.576 personas afectadas, con la distribución de 300 kits de alimentos envasados y 352 platos calientes a personas residentes de los refugios. Además, se distribuyeron colchones, mantas y aislantes para las carpas para mejorar el bienestar de las familias más afectadas.
Los conflictos de Sudán y Sudán del Sur
El conflicto en Sudán del Sur estalló en 2013 como resultado de tensiones políticas entre gobierno y oposición, que se trasladaron al terreno étnico. A pesar de la firma del alto el fuego en 2018, más de 854.268 personas se desplazaron forzosamente a Uganda, principalmente hacia Adjumani, como consecuencia de las vulnerabilidades cronificadas existentes de las personas afectadas por el conflicto (altas tasas de pobreza, desplazamiento generalizado y acceso limitado a servicios básicos de salud, nutrición y educación), intensificadas por el impacto acumulado de las inundaciones recurrentes, así como por la inestabilidad política y los choques interétnicos, impidiendo la consolidación de la paz.
Según datos de ACNUR a 31 de diciembre de 2023, la población en Uganda había aumentado en 10.349 personas con respecto al mes anterior, equivalente a casi el 1% del total de la población refugiada del país.