Millones de personas en Ucrania siguen resistiendo día a día a las consecuencias de una guerra que ha cambiado por completo sus vidas. Familias enteras se han visto obligadas a abandonar sus hogares (3.8 millones de personas desplazadas internamente, según datos de la Organización de las Naciones Unidas) y ahora luchan por acceder a una vivienda segura, alimentos, medicamentos y atención sanitaria, al mismo tiempo que cargan con el trauma y el desgaste emocional de la violencia.
Mujeres, niñas y niños son quienes sufren con mayor crudeza esta realidad, enfrentándose a la incertidumbre y la pérdida mientras tratan de reconstruir un presente en condiciones extremadamente difíciles. A pocos meses de cumplirse cuatro años desde el inicio de la invasión, la urgencia de reforzar la protección y el apoyo a la población civil sigue siendo más necesaria que nunca.
Para seguir respondiendo a este escenario y reforzar el camino hacia la resiliencia y la paz, Farmamundi ha puesto en marcha un nuevo proyecto que busca acompañar a más de 12.900 personas en siete regiones del país, entre ellas Poltava, Sumy, Leópolis, Úzghorod, Ivano-Frankivsk, Chernigov y Járkov.
“Junto a Farmamundi ponemos el foco en tres ejes: la protección y el apoyo psicosocial y jurídico, con especial atención a mujeres en riesgo de violencia de género; la cobertura de necesidades básicas mediante alimentos, medicamentos, productos de higiene y transferencias en efectivo; y la creación de espacios de participación que den voz a nuestras comunidades para construir futuros más dignos”, explica Tetiana Konovalova, coordinadora de proyectos de nuestra socia Gender Bureau. Todas estas acciones son posible gracias a su implicación de largo recorrido y al compromiso solidario de la Generalitat Valenciana, que hace posible continuar y ampliar este esfuerzo en Ucrania.
Refuerzo vital en Poltava y Sumy
Esta nueva iniciativa, refuerza y consolida el trabajo realizado desde 2023 junto a la Generalitat Valenciana en las regiones de Poltava y Sumy, con la participación de 15.545 . “Combinamos apoyo psicosocial, asistencia jurídica, acceso a alimentos y salud, transferencias en efectivo y programas de empoderamiento económico. Todo ello, en estrecha coordinación con autoridades locales y redes comunitarias, reforzando la protección y la resiliencia de las familias más vulnerables”, afirma la responsable de Acción Humanitaria de Farmamundi, Tania Montesinos.
Algunos de los logros de este proyecto recién finalizado son:
- La puesta en marcha de dos equipos móviles multidisciplinares en zonas remotas de Sumy y Poltava, con psicólogos, abogados, docentes y trabajadores sociales que realizaron 101 visitas de campo y ofrecieron 1.985 servicios integrales a 543 personas desplazadas, principalmente mujeres y menores, en comunidades rurales y de difícil acceso.
- Atención en salud mental y apoyo psicosocial: más de 700 servicios psicológicos llegaron a 582 personas, mientras que 3.218 participaron en actividades educativas que reforzaron su bienestar emocional y social.
- Asistencia jurídica y judicial: se brindaron 1.146 servicios legales, principalmente a mujeres, abordando casos de vivienda, derecho de familia y prestaciones sociales, junto a talleres grupales de sensibilización jurídica.
- Asistencia en efectivo multipropósito: 640 transferencias monetarias individuales permitieron a las personas cubrir de forma autónoma sus necesidades más inmediatas.
- Acceso a alimentos y salud: se distribuyeron 500 kits de alimentos, 28 kits médicos en centros rurales y 1.000 vales farmacéuticos para mujeres mayores y personas con enfermedades crónicas.
- Y por último, se dedicó especial atención a la formación y empoderamiento de mujeres: más de 400 mujeres desplazadas participaron en talleres de emprendimiento, búsqueda de empleo y liderazgo, fortaleciendo su autonomía económica y resiliencia.
Una respuesta multisectorial
Desde el inicio de la guerra, Farmamundi ha desarrollado 27 proyectos en Ucrania, alcanzando a 70.559 personas desplazadas y gestionando fondos por un total de 2.203.230,67 €. La colaboración con diversas entidades, como la Generalitat Valenciana, la Xunta de Galicia, el Fondo de Emergencias de Farmamundi y otros organismos descentralizados, ha sido clave para ofrecer una respuesta multisectorial.
Más allá de los números, el trabajo de Farmamundi en Ucrania representa un respiro de dignidad, derechos y esperanza para quienes han perdido casi todo a causa de la guerra. “Gracias a la continuidad de estos proyectos, miles de mujeres, niños, niñas y familias en Poltava, Sumy y otras regiones encuentran apoyo para reconstruir sus vidas en medio del conflicto, fortaleciendo la resiliencia comunitaria y sembrando las bases de un futuro más justo y en paz”, concluye Montesinos.