Tras el devastador paso del huracán Melissa, considerado el más potente en tocar tierra en el Caribe en los últimos 90 años, Farmamundi ha movilizado su fondo de emergencia para asistir a la población afectada en Haití con la distribución de kits con alimentos, agua potable y artículos de higiene, y la realización de operativos médicos con la entrega de medicamentos esenciales.
La intervención, que atenderá a 2.000 personas, prioriza a mujeres, menores y personas mayores de la comuna de Petit-Goâve, una de las zonas más afectadas del departamento Oeste del país.
El huracán Melissa, de categoría 5 y vientos de hasta 280 km/h, impactó en Haití entre el 28 y 29 de octubre, causando 31 muertes (21 niños y niñas), 21 desaparecidos y más de 15.800 personas desplazadas. En Petit-Goâve, el desbordamiento del río La Digue provocó la mayor cifra de víctimas y la destrucción de infraestructuras, viviendas y cultivos. “La población se enfrenta ahora a riesgos de salud pública como las enfermedades diarreicas por el consumo de agua y alimentos contaminados, así como brotes de leptospirosis, dengue, malaria, patologías respiratorias, etc.”, comenta la responsable de Acción Humanitaria de Farmamundi, Tania Montesinos.
400 kits familiares y seis operativos médicos comunitarios
Farmamundi, junto a la ONG local Movimiento Sociocultural para los Trabajadores Haitianos (MOSCTHA) con la que trabaja en el país más de 20 años, y el apoyo también de la Xunta de Galicia, ha priorizado la atención en Des Plantons y Des Fourques, en Petit-Goâve. Con una duración inicial de tres meses, contempla la distribución de 400 kits familiares con cereales, leche, zumo de frutas, sardinas, salchichas, agua; y un kit de higiene compuesto de barras de jabón antibacterial, cloro, alcohol, toallas de mano, detergente, pastillas potabilizadoras de agua y un recipiente de almacenamiento de agua con tapa.
Además, se van a desplegar “seis operativos médicos comunitarios con entrega de medicamentos esenciales dirigidos a las familias damnificadas y acciones de sensibilización para la promoción de prácticas de higiene y prevención de enfermedades como el cólera, la leptospirosis o el dengue, cuyo riesgo aumenta tras las inundaciones”, añade Montesinos.

