Un ciclo de encuentros entre profesionales de Guatemala y la Associació Catalana de Llevadores ha reforzado las capacidades del personal de salud de Santa Lucía Utatlán y Sololá para ofrecer una atención integral, humanizada y culturalmente pertinente a mujeres supervivientes de violencia. La iniciativa forma parte de un proyecto impulsado por Farmamundi y PIES de Occidente, financiado por la Agència Catalana de Cooperació al Desenvolupament.
En Santa Lucía Utatlán, territorio mayoritariamente maya k’iche’, la violencia de género continúa siendo una preocupación urgente. La fragilidad de los servicios de salud, protección y justicia sitúa a muchas mujeres —especialmente jóvenes y adolescentes— en situaciones de riesgo permanente. Para responder a este reto, Farmamundi, PIES de Occidente y la Associació Catalana de Llevadores impulsaron un intercambio formativo centrado en prácticas sanitarias sensibles al género, los derechos humanos y la pertinencia cultural.
A lo largo de cuatro sesiones, los encuentros permitieron analizar protocolos de atención, revisar prácticas y proponer rutas de atención más coordinadas y respetuosas.
Intercambio formativo con la Associació de Llevadores
El ciclo de encuentros reunió a personal médico y de enfermería que había cursado previamente el diplomado Hacia la atención integral a mujeres sobrevivientes de violencia con enfoque de género sensitivo y pertinencia cultural. Con el acompañamiento de las comadronas catalanas, los equipos locales abordaron contenidos esenciales para mejorar su respuesta frente a la violencia:
- Experiencia sobre la aplicación del Protocolo de Atención a Víctimas/Sobrevivientes de Violencia Sexual, identificando lecciones aprendidas y retos para su implementación efectiva.
- Herramientas para la atención en el primer nivel de salud y prevención de la violencia obstétrica, priorizando la intervención temprana y el manejo adecuado de casos dentro de los servicios comunitarios.
- Fortalecimiento de la coordinación interinstitucional para dar respuesta de calidad y calidez a mujeres sobrevivientes, articulando recursos locales e institucionales en circuitos de atención.
- Autocuidado del personal de salud: se abordaron fundamentos de medicina natural, técnicas para el manejo del estrés y el autocuidado emocional de los equipos que atienden situaciones de violencia de género.
Un proyecto integral para proteger derechos
El intercambio forma parte de un proyecto de 18 meses, financiado por la Agencia Catalana de Cooperació al Desenvolupament, que busca mejorar el ejercicio de los derechos humanos de mujeres, niñas y adolescentes en riesgo de violencia en Santa Lucía Utatlán. La intervención se despliega en cuatro líneas principales:
- Sensibilización y prevención comunitaria. Campañas sobre los derechos de mujeres y niñas, formación en igualdad y nuevas masculinidades, y trabajo con radios y medios locales.
- Liderazgo y autonomía de mujeres k’iche’. Fortalecimiento de lideresas, promotoras legales y apoyo a iniciativas de autonomía económica para supervivientes en situación de vulnerabilidad.
- Transformación educativa. Formación docente, diplomados, espacios de diálogo con familias y adolescentes sobre derechos sexuales y reproductivos y cultura de paz.
- Mejora de la respuesta institucional. Refuerzo de capacidades en salud, justicia y educación para activar una ruta crítica eficaz y coordinada. La colaboración con la Associació Catalana de Llevadores constituye un apoyo clave para fortalecer protocolos culturalmente pertinentes.
El proyecto abarca 19 comunidades y alcanza a más de 11.000 personas. En un contexto de pobreza estructural y alta prevalencia de violencia de género, esta intervención contribuye a construir un entorno más seguro y equitativo para las mujeres.

