El pasado 14 de junio disfrutamos del estreno de La salud en mi comunidad, documental que nace del proyecto CreaSalud, en el que diferentes personas reflexionamos sobre el derecho a la salud y la desigualdad en su acceso.
Tras mucho trabajo y preparación, pudimos compartir con las personas que se acercaron al estreno las vidas y experiencias de nuestras protagonistas. Pues esta es la historia de Ana Cecilia, Celmira, Claudia e Irela, cuatro mujeres nicaragüenses de la Costa Caribe Norte que, sin experiencia previa y a través del uso de teléfonos móviles, nos acercan a la realidad multicultural de sus comunidades.
Mediante entrevistas realizadas a agentes comunitarios, profesionales de la salud, agentes de medicina tradicional, parteras… nos adentramos en el día a día de las comunidades de Rosita y el río Prinzapolka para conocer cómo viven. Gracias a estas mujeres, fuertes, empoderadas, valientes, que nos guían en este viaje a través de su mirada y su voz podemos acercarnos un poquito a conocer su realidad y sus historias. Nos muestran todos sus aprendizajes y nos transmiten su valor .
Gracias a todas las personas que acudieron al estreno (¡llenamos la sala!), por compartir con nosotras ese momento de gran emoción e ilusión, por hacernos sentir acompañadas y recordarnos que en este camino de defensa de los derechos de las personas, de solidaridad y de responsabilidad no estamos solas, somos muchas y ¡seguimos siempre caminando hacia delante!
Tras el estreno del documental pudimos disfrutar de un pequeño aperitivo para seguir compartiendo un ratito de diálogo y poder profundizar y reflexionar en las experiencias que aparecen en el vídeo. Durante este tiempo, pudimos grabar unos mensajes para las protagonistas de la pieza audiovisual, donde hablamos de las impresiones, sentimientos, ilusiones y aprendizajes con los que nos quedamos tras visionarla y conocer la realidad y la experiencia de estas mujeres.
Así, podemos ponernos en contacto con las participantes, aunque nos separe la distancia, para generar un diálogo entre Euskadi y Nicaragua. Muchas gracias a todas esas personas que dejasteis vuestros mensajes, vuestro apoyo y vuestros ánimos.
No podemos dejar de agradecer a todas las personas que de una u otra manera habéis hecho posible este día. Un día que refleja el trabajo duro, el entusiasmo y las ganas de tantas y tantas personas que queremos seguir trabajando por que el acceso a la salud sea un derecho universal.