7 de abril. Día Mundial de la salud
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En los últimos sesenta años, distintas conferencias y declaraciones han puesto sobre la mesa la necesidad de garantizar el derecho a la salud. Actualmente existe la iniciativa de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, firmada por más de 191 países de Naciones Unidas para poner fin a la pobreza, garantizar los Derechos Humanos y mejorar las condiciones de vida de toda la Humanidad en un plazo de 15 años. El logro de estos objetivos está en nuestras manos, por ello Farmacéuticos Mundi y Medicus Mundi Catalunya te invitan a participar de esta iniciativa con la campaña de sensibilización “La Salud en el Milenio: una firma pendiente”.
Haciendo un repaso de los últimos sesenta años, se constata que hay un interés y una necesidad de garantizar el derecho a la salud por parte de los organismos internacionales, así como por parte de los gobiernos y de las ONGD.
El año 1949 nacía la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la cual se tomaba como ideal para todos los pueblos y naciones, de manera que estos tenían que esforzarse para promover, mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades, asegurando su reconocimiento y aplicación.
En esta misma declaración se reconocía que “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, a ella y a su familia, la salud y el bienestar, y en especial, la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios” Artículo 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
30 años más tarde, durante la Declaración de Alma-Ata en el año 1978 se expresó la necesidad de tomar medidas por parte de los gobiernos, de los agentes de salud y de la comunidad internacional para conseguir el derecho a la salud de todas las personas del mundo. De ahí, nació la estrategia de atención primaria de salud para mejorar la salud de los pueblos con el lema “Salud para todos para el año 2000”.
En el año 2000, no se logró el objetivo “Salud para todos” por falta de voluntad política, médica e ideológica. Sin embargo, la atención primaria de salud sigue siendo un instrumento válido para orientar las políticas sanitarias y conseguir los índices de salud que permitan conseguir un desarrollo humano sostenible.
En el año 1994, la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo en el Cairo (CIPD), determinó el Programa de Acción sobre la población y el desarrollo (1994-2014), la necesidad de reducir la mortalidad infantil y materna y de garantizar el acceso universal a la educación, especialmente para las niñas, a los servicios de salud sexual y reproductiva y a la planificación familiar. También se trataron cuestiones relacionadas con la población, el medio ambiente y la prevención y la lucha contra la pandemia del VIH/SIDA, entre otras.
En 1999, cinco años después de la conferencia, se examinaron los avances de ésta y se puso de manifiesto que era necesario establecer unas medidas clave para conseguir los objetivos de la CIPD. En 2004 se volvió a revisar el grado de consecución de estas medidas, y se observó, por ejemplo, que existía un progreso en la provisión de información de salud reproductiva para adolescentes y en la forma en que los jóvenes y adolescentes asistían a los servicios. Por otro lado, se observó un aumento de países que habían introducido un enfoque multisectorial para hacer frente a la pandemia del VIH/SIDA, involucrando una amplia gama de ministerios, y completado a su vez por una mayor participación de las ONGD.
La IV Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995) suscribió la Plataforma de Acción, donde se marcaban las pautas en relación a la igualdad entre géneros, el desarrollo y la paz para todas las mujeres.
Tanto la conferencia del Cairo, como la de Beijing establecieron, con el consenso de la comunidad internacional, una base sobre la cual trabajar para los derechos en materia de salud sexual y reproductiva, y especificaron cómo tendría que ser la movilización de recursos.
La última iniciativa, y puede que la más ambiciosa, son los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio, que nacieron el año 2000 de los 191 países de Naciones Unidas para poner fin a la pobreza, garantizar los Derechos Humanos y mejorar las condiciones de vida de toda la Humanidad en un plazo de 15 años. Cuatro de estos objetivos hacen referencia a la salud.
Estos objetivos representan un acuerdo entre los países ricos y empobrecidos, y eso implica un esfuerzo de unos y otros para contribuir a su consecución. Los países empobrecidos tendrán que conseguir los 7 primeros objetivos, mejorando las políticas públicas, los presupuestos y el resto de intervenciones, pero no se lograrán si los países del norte no cumplen con sus responsabilidades, es decir: cooperar más y mejor.
Para acercar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) a la sociedad catalana e implicarla activamente en su consecución, Farmacéuticos Mundi y Medicus Mundi Catalunya estamos llevando a cabo la campaña de sensibilización “La Salud en el Milenio: una firma pendiente”.
Las dos ONGD estamos convencidas de que la sociedad civil catalana puede contribuir a construir un mundo más justo y saludable impulsando la consecución de los ODM en materia de salud, porque entendemos que la mejora de la salud no pasa exclusivamente por la asistencia sanitaria, sino por una mejor distribución de recursos y la voluntad política de cambiar la situación. Está en nuestras manos que los Objetivos de Desarrollo del Milenio estén presentes en la agenda política de nuestros gobernantes, o bien, que pasen a formar parte de los acuerdos internacionales firmados y no cumplidos.
Si quieres implicarte en la campaña entra la web: www.lasalutenelmillenni.org
Fuentes consultadas: http://www.unfpa.org/upload/lib_pub_file/368_filename_beijing-at-ten.pdf http://www.unfpa.org/icpd/index.htm http://www.paho.org/spanish/dd/pin/almaata25.htm
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